Es de sobra sabido que Hollywood lidera la industria del cine a nivel mundial. Casi todo lo que vemos, por no decir todo, proviene de la soleada California. Sin embargo, esto no significa que fuera de sus límites no haya buenas películas. Un ejemplo concreto es el del cine francés, que cuenta con muchas cintas dignas de ser vistas.
Mi interés por la producción cinematográfica del país que alberga la capital del amor comenzó a partir del estudio del propio idioma, así como por la curiosidad que siempre me ha suscitado nuestro país vecino. Muy pronto descubrí la calidad de algunas de sus obras que, a mi pesar, pasaban casi desapercibidas o quedaban ensombrecidas por películas más populares de la cartelera internacional, aunque fuesen éxitos de taquilla en Francia. Por eso, hoy te voy a recomendar unas cuantas, alejadas de nuestra querida y archiconocida Amélie Poulain.
► ‘JEUX D’ENFANTS’ (‘QUIÉREME SI TE ATREVES’, 2003)
Julien y Sophie son dos niños que se entretienen jugando a “capaz o incapaz”. Las reglas son sencillas; quien tenga la caja, tiene el poder de dar una orden al otro. Lo que comienzan siendo simples travesuras infantiles de dos amigos, con el paso de los años, se transforman en juegos más complicados. Julien y Sophie han crecido y los mandatos toman otro cariz. ¿Serán capaces de enamorarse y dejar el juego a un lado?
Una historia de amor diferente contada de forma distinta y con un final que, incluso a día de hoy, sigo dándole vueltas, ya que se puede interpretar de forma abierta. Destaca la química especial entre los dos actores, Guillaume Canet y Marion Cotillard, que acabaría traspasando la gran pantalla para convertirlos en marido y mujer años más tarde.
► ‘UN LONG DIMANCHE DE FIANÇAILLES’ (‘LARGO DOMINGO DE NOVIAZGO’, 2004)
Otra historia romántica, esta vez ambientada durante la Primera Guerra Mundial. Mathilde (Audrey Tautou) debe recorrer un largo camino en busca de su enamorado, Manech (Gaspard Ulliel), que ha sido declarado muerto tras ser condenado por desertor. Nuestra protagonista no se da por vencida y comienza a indagar para saber lo que realmente ocurrió.
A través de flashbacks y declaraciones de los que conocieron a Manech, el enigma se va resolviendo y descubrimos todo a la par que ella, lo cual, desde mi punto de vista, hace más atractiva e interesante la historia. Gracias a que acompañamos a Mathilde en su investigación, el argumento mantiene la intriga y la tensión hasta el final.
► ‘LA MÔME’ (‘LA VIDA EN ROSA’, 2007)
Poco importa si no se conoce a la cantante protagonista de este biopic, Édith Piaf. Marion Cotillard interpreta magistralmente a una mujer con carácter y de baja estatura, apasionada y con una voz inigualable cuya vida estuvo llena de altibajos.
El filme es un drama acompañado de canciones sublimes de la artista que la hicieron mundialmente conocida a partir de los años cuarenta y que sirvió a la joven actriz para que se le reconociera internacionalmente y ganar su primer Oscar.
► ‘INTOUCHABLES’ (‘INTOCABLE’, 2011)
Film basado en hechos reales: Philippe es un hombre de clase alta, culto, serio y tetrapléjico que necesita un asistente personal. Driss está en paro, posee antecedentes penales pero es optimista y divertido. Cuando este se presenta sin ninguna pretensión a la entrevista, no espera que finalmente sea él el elegido para hacerse cargo de Philippe.
Lejos de tratar la tetraplejia desde su punto dramático, 'Intocable' es un canto al optimismo, a las ganas de vivir y, sobre todo, a la amistad. No se deja de reír y sonreír en ningún momento del filme y, cuando acaba, contagia esa alegría y deja un muy buen sabor de boca.
► ‘LA FAMILLE BÉLIER’ (‘LA FAMILIA BÉLIER’, 2014)
Es la historia de Paula, única oyente de una familia sorda. Ella ayuda en la granja familiar y sirve de intérprete y conexión entre sus padres y hermano y el resto del mundo. Acostumbrada a no alzar la voz, cuando su profesor de canto le dice que posee un don, todo cambia y las dudas surgen. ¿Cuál es la vida que quiere vivir?
Una comedia que no trata sobre la sordera, sino de ser valiente para intentar alcanzar tus sueños, de la madurez y de dejar el nido paterno para poder volar. Una obra magnífica que también deja buenas sensaciones en el cuerpo.
► ‘TROIS COULEURS: BLEU’ (‘TRES COLORES: AZUL’, 1993)
Primera película de una trilogía que representa la bandera francesa (los colores azul, blanco y rojo), cuya trama es la que más recuerdo y la que más me gustó cuando la vi hace ya más de doce años.
Evidentemente, una de las partes fundamentales es la fotografía, ya lo dice el título. El color azul está presente en todo el largometraje (así como los tonos oscuros y fríos) y es una característica del personaje principal, Julie (Juliette Binoche) cuyo pasado la atormenta. Un drama desgarrador sobre la pérdida, no apta para quien busque el puro entretenimiento. Aquí uno debe deleitarse en la imagen, la música, el silencio y los sentimientos.